Por Carla Olivares Cariaga
ONG Amaranta
Tras la finalización del 25 Festival de Cine de Valdivia, transcurrido entre el 8 al 14 de octubre, y tras ver más de 20 films, en donde más de 10 de estos eran de cineastas mujeres, puedo expresar una enorme satisfacción como espectadora y como mujer. Las temáticas, los diálogos (guiones), los roles femeninos en posiciones principales y las producciones, exhibían un cine del que muy poco sabíamos y con una mirada completamente distinta.
Recordemos que, en la cinematografía, el trabajo de la mujer jamás fue destacado, limitando su labor a un mero objeto de goce masculino. Recién en esta última década, es posible visibilizar su real protagonismo que es de gran valor simbólico, estético y además necesario, por los diversos enfoques que presenta, dado el urgente cambio social que estamos viviendo. Y el FIC Valdivia 2018 es un ejemplo de esto. Seguir leyendo