Por quinto año y con cientos de asistentes se llevó a cabo TetArte en Concepción. Se trata de un proyecto fotográfico que busca visibilizar la lactancia materna, además de desmitificarla y entregar información. Comenzó hace siete años en Santiago y, hasta hoy, reúne a decenas de madres y a sus hijas e hijos de distintos rincones del mundo.
Mery Vega Auger es una de las organizadoras de esta instancia en la Región del Biobío. Ella explica que decidió involucrarse porque «yo estaba amamantando, estaba muy sensible a esa temática y notaba que en mi entorno no todas lo estaban disfrutando». Para ella, esta es una forma de abrirse camino para lograr el amamantamiento libre y público: recordemos que han existido distintos casos de mujeres que han sufrido la discriminación por hacerlo en lugares públicos, motivo por el cual en enero se aprobó una ley que establece su libre ejercicio y multas para quienes no respeten esto.
Vega explica que por haber amamantado hasta los tres años, sentía la mirada crítica de todos: «sentí que había que empoderarse y unirse. Para nosotras, el tema de la red de apoyo es crucial, porque las mujeres que amamantamos estamos pasando por una etapa muy hermosa, pero también de un rigor muy alto. TetArte, por un lado invita a eso, a unirse y acompañarse en este acto. Pero también a empoderarse, que es el lema de este año y creemos que este viene de la mano de la información», declara.
Como una forma de educar y concientizar, la actividad incluyó stands informativos, en los cuales se conversó sobre métodos de anticoncepción, técnicas de lactancia, salud ginecológica y nutrición, entre otras.
Antes de la fotografía masiva de madres amamantando, la agrupación Tribu Eluney presentó varias coreografías de danza porteo, en la cual combinaban la actividad física, la danza y el apego hacia hijas o hijos.
Finalmente, la jornada cerró con la obra de teatro-foro sobre la violencia gineco-obstétrica llamada «Te voy a dejar de quince». Esta representaba distintas situaciones que se dan tanto en el sistema de salud público, como privado: negación de condón femeninos a mujeres lesbianas o bisexuales, discriminación y tratos humillantes a adolescentes y distintas situaciones de partos no respetados fueron parte del repertorio que, a través de la técnica del teatro de las oprimidas, hizo participar a los y las asistentes, de manera de reflexionar y proponer soluciones a estas situaciones de violencia diaria.
En Chile, se ha logrado aumentar el porcentaje de prevalencia de lactancia materna, de un 40% en 2011 a un 57% en 2017, acercándose al 60% que recomienda la OMS. Grupos de apoyo a la lactancia materna (GALM) y una mayor concientización en torno al tema, han ayudado a mejorar la cifras. Pero, a pesar de estos avances, nuestro país aún está al debe en temáticas como la violencia gineco-obstétrica, la cual ni siquiera está penada por ley y está tan invisibilizada, que no se cuenta con cifras oficiales que permitan evaluar la magnitud del problema.